Si quieres escapar a un pueblo ubicado en lo más recóndito del país, donde solo reine la tradición, la aventura, el misterio y la majestuosidad, el Pueblo Mágico Batopilas es el lugar perfecto ya que se encuentra ubicado entre montañas y barrancas que en tiempos antiguos era poblado por minas de plata. Con apenas tres calles que lo componen y todas sus fachadas y arquitectura de aspecto colonial, es un pequeño rinconcito de México habitado por los tarahumaras o también conocidos como rarámuris, quienes mantienen las tradiciones y costumbres indígenas ancestrales, prevaleciendo estas por encima de la cultura occidental.
Los rarámuris llamaron a este lugar Bachotigori que significa “Lugar de Las Aguas Cerradas”, este pequeño pueblo fue fundado en el año 1708 por el explorador español José de la Cruz quien lo constituyó como una comunidad minera muy prometedora en el ámbito económico debido a que este había descubierto las minas de plata, mineral con el cual el pueblo tuvo un gran auge y reconocimiento a nivel internacional.
Batopilas llegó a ser poblado por más de ocho mil habitantes quienes dieron pie a la construcción de las edificaciones suntuosas que son muestra emblemática de la bonanza que hubo en aquellos tiempos y atractivo especial que en la actualidad incita la visita de turistas al lugar quienes quedan encantados con todo el paisaje y las tradiciones que este encierra. Batopilas, a pesar de ser un pueblo pequeño, posee muchos lugares de interés que están llenos de historias y por lo cual fue declarado como Pueblo Mágico el 19 de Octubre de 2.012 por el gobierno de México.
Batopilas se encuentra ubicado a una distancia de 379 km aproximadamente de la capital del estado, en lo profundo de La Sierra Madre Occidental, en las Barrancas de Cobre, este municipio se encuentra en la Región de La Sierra de Chihuahua y sus límites son, por el suroeste con el estado Sinaloa, al noroeste con el municipio de Urique, al este con el municipio de Guachochi y al sur limita con el municipio de Morelos.
Su clima es variado y va a depender de la altura o profundidad en la que te encuentres, en lo alto de las montañas tiende a hacer fuertes corrientes de frío y en lo profundo de las barrancas el clima es tropical, las temperaturas van desde 1° C hasta los 43° C y el promedio es de 17° C, como el clima es variado, se recomienda tomar previsiones respecto a la ropa que debe ser adecuada para ambas temperaturas y así puedes conocer ambas partes del lugar vestido acorde.
Desde el comienzo del camino a Batopilas se comienza a sentir lo emocionante del recorrido, lleno de imponentes montañas y todo el atractivo natural que te acompaña durante el trayecto. Ya en la entrada al pueblo, los que le visitan son recibidos por el río que lleva el mismo nombre del pueblo Batopilas y un acueducto de gran tamaño y belleza arquitectónica, el cual fue construido en el siglo XIX y formaba parte de La Ruta de Plata.
La Hacienda San Miguel: es una edificación construida en pleno auge minero, esta fue propiedad de un extranjero de nombre Alexander Robey Shepherd ó mejor conocido como el Magnate de la Plata, quien logró sus riquezas gracias a los minerales que extrajo de las minas a finales del siglo XIX. Fue él mismo quien dio impulso a la construcción de la única escuela y hospital que hay en el pueblo así como también fue el promotor de que Batopilas fuera el segundo pueblo en todo el país en obtener servicio de energía eléctrica.
Esta hacienda alberga en su interior, recuerdos de la bonanza que hubo en la época, mostrados a través de los detalles decorativos que gozan de exquisito gusto y elegancia y por la amplitud en cada uno de sus espacios así como los jardines y salones.
La Casa Barffuson: esta fue usada como residencia por el Marqués de Bustamante, comisionado por parte del Rey de España para dirigir en esa localidad. Esta casa de esplendoroso estilo colonial fue construida a finales del siglo XVIII, al observar sus habitaciones decoradas con gran belleza, detalle y delicadeza, se hace sencillo traer a la mente pensamientos de la gran riqueza que vivieron en esa época de antaño.
Hay otras casas del mismo estilo colonial que poseen su encanto las cuales puedes visitar, estas son, la Casa donde nació Manuel Gómez Morín, fundador de la Escuela Bancaria Comercial, del Partido Acción Nacional y 19° Rector de la UNAM.
La Casona apreciada por su enorme tamaño, funciona en los tiempos actuales como la Escuela Sor Juana Inés de la Cruz, también está la Casa Biggler que en la actualidad sigue conservando la mayoría de su mobiliario original, la Casa de Raya y la Casa Cural, construidas durante el mandato de Porfirio Díaz no dejan atrás su belleza y esplendor.
El Templo de la Virgen Del Carmen: es una construcción hecha por los jesuitas durante el siglo XVII, una de las más impresionantes y antigua del lugar, con una imponente y hermosa fachada, posee en su interior pinturas, esculturas y un campanario diseñado con una sola pared.
Uno de los sitios que no puedes dejar de visitar es el Campamento Minero de Cerro Colorado, donde consigues como testigos del paso del tiempo los túneles, canales, acequias, puentes y algunas obras étnicas dignas de admirar. Las diferentes minas ya fuera de uso, son lugares memorables que puedes visitar con algún guía del sector, estas minas son los recuerdos de un pueblo que fue próspero y esplendoroso hace mucho tiempo atrás.
La mejor época para visitar el Pueblo Mágico Batopilas, es durante la celebración de la Semana Santa, donde festejan las tradiciones católicas mezcladas con las tradiciones taraumaras haciendo de estas fiestas un colorido evento religioso donde predomina el agradecimiento y honra a Dios por su protección haciendo alusión a la interminable guerra entre el bien y el mal, más no toman en cuenta la muerte y resurrección de Cristo.
Esta mezcla donde se concilian diferentes doctrinas y tradiciones es único en el mundo y es tomado por los habitantes rarámuris con la total seriedad y honor que dicha celebración se merece. Otra fecha importante de celebración y a la que no puedes faltar, es el 16 de Julio, donde se lleva a cabo la fiesta en honor a la Virgen Nuestra Señora del Carmen.
La Catedral Pérdida de Satevó: Como testimonio del regalo de las misiones que visitaron la población de Batopilas, se encuentra a tan solo 8 km al suroeste de este pueblo, la Misión de San Ángel quien es custodio de Satevó, su construcción data de mediados del siglo XVIII y su propósito era que funcionara como monasterio.
Por su exuberante belleza y por su aislada ubicación, esta obra arquitectónica es la más impresionante de Las Barrancas de Cobre, esta edificación está envuelta por la magia del paisaje en sus alrededores haciendo del lugar una visita que nunca olvidarás.
Hacienda de San Miguel: En varios hoteles ubicados en Batopilas prestan el servicio de excursiones guiadas que llevan hasta las ruinas de la Hacienda de San Miguel y la llamada Misión Pérdida.
Las Rutas de la Plata: Durante el mes de Octubre de cada año, se realiza un evento que dura dos semanas, en este tienes la oportunidad de disfrutar en su máximo esplendor toda la belleza del paisaje que rodea a Batopilas y de conocer todas las edificaciones religiosas que se encuentran a lo largo de las barrancas. Si eres de espíritu aventurero te encantará la experiencia de pernoctar a orillas del camino y en las antiguas estaciones de servicio que se encuentran en el trayecto.
Hacer un recorrido por donde era llevada la plata y las misiones, es una aventura que no te puedes perder ya que tienes la oportunidad de conocer bien de cerca todo lo referente al poblado y lo que le llevó a ser tan prospero en el pasado.
Barrancas del Cobre: Desde Batopilas puedes organizar un recorrido a las famosas barrancas del cobre para disfrutar de todo su esplendor. El recorrido toma algunas horas pero valen la pena. Si te animas a explorar esta zona te recomendamos contactar con la agencia Barrancas del Cobre Tours quienes son expertos en este tipo de recorridos en la zona.
El Arriero: es una figura en desaparición y a la cual se le brinda una celebración en honor al legado cultural de la ruta ancestral y para ello la Asociación de Arrieros hace un recorrido a caballo que cubre una distancia de 385 km, parecido al recorrido que hacía en tiempos antiguos, partiendo desde el pueblo Batopilas hasta la capital del estado que era a donde llevaban la plata que extraían de las minas.
El Rio Batopilas: Y para que continúes con la aventura, en las orillas del Rio puedes acampar y refrescar tu cuerpo en sus ricas aguas.
El Mirador de La Bufa: Este mirador es el mejor de la región, le brinda al visitante una vista de unos 1.300 metros de profundidad y desde allí se puede ver en buena parte de su extensión el Rio Batopilas y una de las vetas de gran importancia de las 300 que estuvieron en la zona. Para llegar hasta este mirador se recomienda partir desde los municipios Creel o Guachochi, es un paseo realmente muy gratificante y lleno de aventura ya que se atraviesa por los bosques y algunos pueblos mineros, rodeados de hermosos paisajes, para luego hacer el descenso caminando o montado a caballo.
Misiones Nuestra Señora de los Dolores de Samachique, Nuestra Señora de Loreto de Yoquivo y la misión de Tonachi: La visita a estas misiones son espectaculares para quienes gustan de hacer excursiones, atravesando por barrancas, ríos, pueblos mineros, campamentos de rarámuris y todo un paisaje lleno de bellezas naturales propias de la región. Pueden ser excursiones muy cortas de apenas horas de duración o programarte para cubrir un recorrido mayor que puede llevarse días de camino y con la cual conocerás más a fondo cada rincón de ese maravilloso Pueblo Mágico Batopilas.
Compra de artesanías en Batopilas: En el pueblo puedes conseguir diferentes artesanías elaboradas por los habitantes tarahumaras, quienes se han dedicado desde tiempos ancestrales a la elaboración de utensilios de cocina, tallados de madera, instrumentos musicales tales como violines y tambores, cestas tejidas con fibras de sotol, diversas vasijas de cerámica y ollas.
En Batopilas se mantienen las tradiciones religiosas y culturales y no escapa a ello la tradición en el ámbito gastronómico, deleitando el paladar de sus visitantes con su gran variedad de comidas llenas de sabores.
Para llegar a Batopilas, uno de los Pueblos Mágicos de Chihuahua más pequeños, es necesario tomar un vuelo en avión desde la capital hasta la ciudad de Chihuahua, desde allí el traslado continúa por carretera, en coche o autobús saliendo desde Creel, y para los más aventureros, cuentan con la opción de trasladarse en el tren llamado El Chepe, que les lleva hasta la estación Bahuichivo para descender luego por la Barranca de Batopilas, montado a caballo o caminando, haciendo del trayecto todo un recorrido maravilloso.
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